La drástica y forzada caída de la actividad económica entre las entidades de la república a causa de la pandemia de Covid-19 fue relativamente breve, a juzgar por lo que nos indican los índices de actividad económica publicados por INEGI. Sin embargo, es necesario notar que la actividad económica en sí misma no es equivalente a crecimiento económico. El efecto de la recuperación de los niveles de actividad económica sobre el crecimiento económico puede no ser inmediato, pero ya se están planteando algunas cifras preliminares de cómo crecerá la economía mexicana al cierre de 2021. El Secretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien a partir de Enero de 2022, previa ratificación del Senado, se convertirá en el nuevo Gobernador del Banco de México, ha mencionado que, por lo menos de manera informal, es posible pensar en una tasa de crecimiento para 2021 de 6.5%. [1]

Fuente de la imagen:PIXABAY.

En entrevista para el diario El País, el propio Arturo Herrera resaltó que la recuperación esperada para la economía mexicana será asimétrica en principio, en el sentido de que los sectores no intensivos en contacto físico serán más dinámicos que los sectores intensivos, como la hotelería. Además subrayó la importancia de las vacunas en el proceso de recuperación económica. [2]

Hugo López-Gatell opina que la inmunidad de rebaño en México podría ser alcanzada entre Agosto y Septiembre de 2021, pero esta afirmación no es unánime entre la comunidad de expertos. [3]

Desde la perspectiva de la OCDE, el avance en la vacunación contribuiría a elevar los niveles de consumo de la economía, pero además de esto, se necesita estimular la inversión, que desde antes de la pandemia reflejaba una tendencia descendente. [4]

Las remesas provenientes de Estados Unidos, de manera consistente han superado los flujos por venta de petróleo en los últimos años, y sin duda alguna representan un factor de estímulo muy importante para la recuperación del consumo interno. En Mayo de 2021 representaron más de 4 mil quinientos millones de dólares. [5]

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Además de esto, la recuperación económica en Estados Unidos, tenderá a su vez a beneficiar la recuperación en México, a través de diversas vertientes, pero principalmente por medio del T-MEC. [6]

En relación a la inversión extranjera directa - IED-, existe una clara discrepancia entre las cifras estimadas por la Secretaría de Economía y las que proporciona el Banco de México. Mientras la Secretaría de Economía planteó de manera preliminar un crecimiento de 14.8% para el primer trimestre de 2021, respecto a 2020, [7] la Balanza de Pagos de Banxico refleja una caída de 29.2% en el mismo período. [8]

Algunas empresas muy importantes en México invertirán mucho durante 2021; tal es el caso de BIMBO, que planea invertir hasta mil millones de dólares en bienes de capital. [9]

Sin embargo, no está claro aun, cuáles son las empresas que están dispuestas a invertir cantidades importantes tanto en lo que resta de 2021 como durante 2022. La postura de la Coparmex acerca del efecto que tendrá la subcontratación en la inversión es adversa, [10] lo que refleja la poca disposición de sus miembros a incrementar los niveles de inversión en el mediano plazo. En principio, los inversionistas del sector energético, han decidido detener sus proyectos de inversión, en espera del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre la constitucionalidad de las reformas a la Ley de la Industria Eléctrica y la Ley de Hidrocarburos. [11]