Puebla, Pue. | Lunes 11 de Enero de 2021. |
La nueva cepa encontrada en Reino Unido se transmite con mayor facilidad, pero no existe evidencia de que cause un infección más grave. [1]
La Doctora María Van Kerkhove, Consejera Senior del Director General de la OMS, mencionó que en base a los datos que tienen disponibles, los científicos del Reino Unido consideran que las vacunas desarrolladas hasta ahora siguen siendo efectivas. Refirió que son tres los aspectos que investigan los equipos de trabajo con respecto a esta cepa: la transmisión del virus, el tipo de infección, y la dinámica cuerpos-anticuerpos. Lo que los científicos han encontrado es que la capacidad de reproducción del virus - entendida como el número de personas que un individuo infectado puede a su vez infectar- se ha incrementado en 0.4 personas, de modo que ha pasado de 1.1 personas a 1.5 personas, pero aún no queda completamente claro qué tanto de este incremento se debe a la mutación en sí y qué tanto se debe a algún cambio en el comportamiento de las personas. Por otro lado, la mutación encontrada en Australia es la misma que la del Reino Unido pero es una variante diferente. [2]
La Doctora Van Kerkhove resaltó que el virus SARS-CoV-2 en cualquiera de sus formas es un virus peligroso, pero las medidas de prevención contra el mismo, también aplican igual para cualquier variante del virus. También expresó la importancia de mantener una búsqueda del virus a través de una dinámica estratégica de pruebas de detección. Además aclaró que la enorme mayoría de las pruebas de detección del virus, no pierden su efectividad frente a esta nueva cepa, y que sólo las pruebas que utilizan "un sólo objetivo" son susceptibles de fallar. [2]
El domingo 10 de Enero de 2021 el gobierno de Tamaulipas confirmó el primer caso de esta nueva cepa en México. Se trata de un ciudadano de Reino Unido que llegó al aeropuerto de la Ciudad de México desde Ámsterdan. [3] El primer caso de esta cepa en Estados Unidos se registró el martes 29 de Diciembre de 2020,[4] mientras que en América Latina el primer caso se registró en Chile con una mujer proveniente de Reino Unido que realizó una escala en Madrid, España. [5]