El ejercicio previo [1] de ingreso laboral consistió en revisar la evolución a precios constantes [2] del ingreso promedio por hogar (promedio nacional), [3] y compararlo con el ingreso laboral per cápita [4]. El período de análisis para este primer ejercicio va del primer trimestre de 2005 hasta el segundo trimestre de 2018. En la última parte del período se observa una recuperación del ingreso laboral per cápita. Sin embargo, a lo largo de ese mismo período se puede identificar una tendencia negativa en la evolución del ingreso promedio por hogar a precios constantes. En ambos casos - ingreso laboral per cápita y promedio nacional del ingreso promedio familiar-, se aprecia una recuperación para los últimos tres trimestres - Trim 4, 2017, Trim 1, 2018 y Trim 2, 2018-.

El objetivo del presente ejercicio consiste en actualizar el período de análisis hasta el trimestre 1 de 2020. Para obtener los valores a precios constantes se utiliza ahora el Índice Nacional de Precios al Consumidor base Segunda Quincena de Julio de 2018 = 100. Adicionalmente se trabaja con algunos resultados a nivel entidad federativa, comenzando en esta ocasión con los estados de Aguascalientes, Oaxaca y Puebla. No existe ningún criterio particular para la elección de estos tres estados, y de hecho, el objetivo es obtener resultados para todos los estados de la República Mexicana.

En las cuatro gráficas de este ejercicio - Nacional, Aguascalientes, Oaxaca y Puebla-, las series azules - Ingreso A-, son los valores a precios constantes del ingreso laboral promedio por hogar (promedio nacional o estatal según sea el caso), mientras que las series rojas son los valores a precios constantes del ingreso laboral per cápita - Nacional, de Aguascalientes, de Oaxaca, o de Puebla, respectivamente-. La recuperación de los últimos tres trimestres en el primer ejercicio - Trim 4, 2017, Trim 1, 2018 y Trim 2, 2018-, se tradujo en este segundo ejercicio, en una tendencia positiva tanto del ingreso per cápita como del ingreso promedio por hogar - Gráfica 1. Nacional-, para el período 2017, TRIM 4 - 2020, TRIM 1. De hecho, esta tendencia positiva se aprecia también para los tres estados analizados, aunque en el caso de Puebla, el último trimestre analizado - Trim 1, 2020- representa una caída respecto al trimestre inmediato anterior en relación a la serie azul - ingreso laboral promedio por hogar (promedio estatal de Puebla)-.

Tanto a nivel nacional - Gráfica 1-, como para los casos de Aguascalientes y Puebla - Gráfica 2 y 4 respectivamente- se observa claramente que el ingreso laboral per cápita es superior al ingreso promedio por hogar (promedio nacional). Como se mencionó en el ejercicio previo, la razón más inmediata puede ser el hecho de que en el caso del ingreso promedio por hogar, dicho ingreso se reparte entre todos los miembros de la familia, independientemente de si trabajan o no. En el caso de Oaxaca, y particularmente durante la primera mitad del período analizado se aprecia una estrecha cercanía entre ambas series, llegando a entrelazarse en varios trimestres. Esta observación podría sugerir que para estos trimestres, la mayor parte de los miembros de familia en Oaxaca se encuentran trabajando.

A precios constantes de la segunda quincena de 2018, el ingreso laboral percápita de Aguascalientes Puebla y Oaxaca fue de 2738.14, 2209.74 y 1505.24 pesos en el primer trimestre de 2020. Es decir, Oaxaca está considerablemente abajo de los otros dos estados en este rubro. Sin embargo, en términos del ingreso promedio por hogar (promedio estatal), Oaxaca se encuentra muy ligeramente por encima de Puebla, con 1291.42 y 1270.73 pesos a precios de la segunda quincena de 2018, fundamentalmente por la caída de Puebla en el trimestre 1 de 2020 respecto al trimestre previo. Aguascalientes también se encuentra por encima de ambos estados con 1745.41 pesos a precios constantes en el último trimestre de la serie.

En su presentación de resultados nacionales del ITLP - Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza- CONEVAL señala algunas expectativas sobre los efectos que tendrá la contingencia sanitaria derivada de la pandemia de la COVID-19 sobre la ocupación laboral y sobre el propio ITLP. [5]